12V
El futuro inmediato va a 12 voltios. Ya lo he decidido.
Siendo ya reales las energías renovables, es absurdo y ridículo pagar una factura de 300-400 euros para estar calentito en invierno. Es más: tendría que estar prohibido por ley.
Yo, por ejemplo, odio actualmente las cocinas eléctricas. No me apaño. No calientan bien. No hay dios que las limpie. Yo, la de gas, la limpio cuando tiene mierda y tan bien. La "vitro"... Eso no hay quien lo limpie. Es decir, para dejarlo brillante y sin rayajos. Los hierros de una cocina de gas ya les puedes dar con la esponjilla de acero durante veinte años, que cada vez están más monos. Pero una vitro en seguida se parece a una ventanilla del metro.
En ese sentido, yo consideraría un capricho o una manía cocinar con gas natural (o butano, o propano).
Tengo la luz con Iberdrola y unos tubos de Gas Natural (que ahora van juntos) en la ventana. Les pregunté cuánto costaba dar de alta el gas. Me dijeron que la instalación corría de mi cuenta. Perfecto. ¿Y darme de alta? No sabían decirme (????), pero alrededor de 200€. Si ellos no hacen la instalación ni una revisión (gratuitamente), ¿en qué consiste darse de alta? => Deduzco que consiste, ni más ni menos, que en marcar la casilla de "también gas" en mi ficha de cliente. 200€ de vellón. Sea como sea, lo tienen perfectamente estudiado para que el consumo de gas y electricidad sea más o menos equivalente. Yo tengo dos casas abiertas, una con gas y otra con luz, y se gasta el mismo dinero en la factura para tener un bienestar equivalente.
Yo, a capricho, como digo, cocinaría siempre que pudiera con gas. Ahora estoy con butano y la bombona puede durarme varios meses (menos de 20 pavos la botella). Si es sólo para cocinar, el gasto es poco. Si es para agua caliente o calefacción, me consta que el gasto es mucho mayor. Pero lo lógico sería que casi todo fuese eléctrico, ya que las renovables funcionan así: de la energía mecánica se obtiene energía eléctrica (eólica, mareomotriz, etc.) y no un gas, que es un combustible fósil. Es tan cromañón quemar un leño como el gas "natural". Es una cosa que tendría que quedar obsoleta ya mismo.
El costo tendría que ser muy reducido para las grandes empresas con capacidad de inversión, y no muy elevado, como se nos dice. Me explico. Si yo tengo una casa donde poder montar una instalación de fotovoltaica, la monto y en dos o tres años (a lo sumo) está amortizada. Eso, si la monto yo. Si me la monta una "empresa especializada", ya se multiplicará por cinco. Y esa instalación dura ya para siempre, sustituyendo piezas ocasionalmente: un panel estropeado, una batería que se ha muerto, etc. Todo muchísimo más económico que pagar 2000 pavos al año (por ejemplo) hasta que uno se muera: 50 años = 100.000 pavos. Así son las matemáticas. 100.000 pavos en energía. Y con una buena instalación de renovables, en 50 años... Yo qué sé: ¿la décima parte? Y eso ahora, que los rendimientos son deficientes. Antes había paneles de 10, 20, luego de 40, luego de... 200W. Y me imagino que así seguirá subiendo, cada vez más prestaciones, y a un coste más reducido. Como los ordenadores, como cualquier otra cosa tecnológica... ¿Cuánto valía en la tienda la primera TV doméstica? Pues más o menos lo que hoy cuesta un coche. Hoy te encuentras en la basura una tele que funciona y que da 100 veces más de calidad que la primera televisión (mi cuñado tiró una hace poco, algo equivalente a la típica Trinitron de 15 pulgadas, que en 1929 hubiese parecido algo ultraterreno).
Las eléctricas tendrían que estar obligadas por ley a generar energía limpia total y absolutamente reciclable. Bajo ese presupuesto, los precios de mercado tendrían que reducirse a lo irrisorio (en comparación con lo que hoy es técnicamente posible). Pero eso es imposible de todo punto, porque hay que pagar unos sueldos irreales y sostener unos puestos de trabajo absolutamente innecesarios. Es por eso que se sigue sacando al mercado amianto (blanco, o del color que sea), porque es muy rentable coger una pedrusca del suelo y venderla como si fuera oro, aunque dé cáncer. Es, literalmente, la leyenda del Rey Midas. Sin hacer nada en concreto (es decir, tirando de leyes físico-químicas con dos o tres siglos de edad), te levantas un pastizal. Y si te actualizas, palmas pasta.
Por eso el futuro pasa por los 12 voltios. Observo (sin tener ni puta idea) que los 12 voltios sí que son más o menos estándar. Las redes domésticas pueden ir a muy distintos voltajes, según el sitio. Pero lo de los 12 voltios tiene un apaño más o menos universal, desde la batería del coche hasta la batería de meter las renovables (por lo menos a nivel doméstico).
En Internet tenemos el W3C, que se inventa unos estándares (que nadie cumple, en realidad, pero que son un punto de referencia, a base de cansinismo). Pero eso es "usabilidad". Algo como la electricidad, que es mucho más básico, tendría que estar ya estandarizado desde hace años y años y años y años y años. Seguro que me estoy pasando por el arco del triunfo un montón de ciencia pero, por lo general, a nivel filosófico no tiene ningún sentido EN ABSOLUTO que aquí en España tengamos 220V y en Pepitolandia 110 (por poner un ejemplo).
La estandarización ayuda, pero es lo de menos. Lo importante es lo de las renovables. Insisto: si uno tiene la posibilidad (espacio, condiciones) para montar un molino, fotovoltaica o lo que sea, se amortiza rápido. Es una inversión a medio plazo, como quien dice, en estos tiempos en que no sabe uno dónde estará hoy y dónde mañana.
Pero, a nivel empresarial, o estatal (donde se sabe perfectamente dónde uno estará mañana), eso ya tendría que llevar años y años en producción. No en producción: en USO. Suponiendo que el coste sea demasiado elevado para hacerlo así, de sopetón, se puede ir escalando. Es una cosa modular. En tiempos de Franco se cogía un valle, se desalojaba por completo y allí se hacía un puto embalse, para beber o para producir energía, y aquí paz y después gloria. Ahora no, porque las empresas son privadas y hacen lo que les sale de los cojones, haciendo uso de algo que fue expropiado en su día. Eso está muy bien. ¡Y no les pidas que lo devuelvan! ¡Ni que inviertan para mejorarlo todo! No, no, no... Eso hay que explotarlo hasta que reviente.
Leo en la historia de la tele que primero fue UK, luego un tipo en USA, luego otro ruso, luego... Como siempre, un invento común. A lo mejor surgió de uno algo, el comenzar, pero ya estaban todos en el ajo investigatorio y habría sido cuestión de tiempo. Al final hicieron falta varios señores, varias empresas y un montón de años (con un montonazo más de mentes pensantes) para llegar a lo que es hoy la puta tele. Entre medias, patentes y ostiejas, que es como decir "¡Eh! Yo he llegado el primero". Claro... Porque eras el único que iba al punto XYZ... Soso. Más que soso. ¡Inútil! Que han hecho falta 3.000 personas a lo largo del tiempo para que tu puto invento sirviera para algo. ¿Quién sabe? A lo mejor por culpa de este señor se han retrasado 50 años los LCDs.
Sea lo que sea, lo que sí está claro es que aquí lo único que vale son los intereses comerciales. A mí me parece muy bien reconocerle el invento a un señorín, y me parece muy mal que a costa de patentes y gilipolleces al final todo quede en que los socios capitalistas se ponen de acuerdo para explorar mesuradamente al usuario de la invención. ¡Con tecnología de hace más de medios siglo! Ostias, que las primeras fotovoltaicas "famosas" están en órbita desde el año '58 del siglo pasado. Vale que utilizasen galio o lo que fuera. Pero es que aquí llevamos cientos de años quemando carbón (!!!). El otro día decían que en Pekín había no sé si 900 microgramos de mierda por metro cúbico de aire, cuando lo máximo recomendado era de 27 microgramos. Estamos hablando de unos 20 millones de personas respirando veneno en su vida diaria. Y a China se la considera una economía emergente. ¿Eso qué es? Dinero. Comercio. Aprovechar, sin más ni más, la ignorancia, la comodidad. No es que sean muy emergentes los chinos. Es que en un contexto donde todo vale si pillas pasta, cualquier cosa es válida. Por eso el amianto viene de China, pero también de Canadá. Manda la pasta.
Mi apotegma en este caso es siempre el mismo: es posible otro mundo. Puede seguir habiendo gente que se forre de pasta con poco esfuerzo, pero sin joder a los demás. ¿A cuento de qué tiene uno que trabajar a día de hoy 8 horas diarias? Si yo quisiese/pudiese ser autarca, con dos o tres horas diarias de curro sería más que suficiente, en unas buenas condiciones de gestión energética (agua, luz, calor). A lo mejor no hay para todos, pero si para la mayoría. Para la "mayoría de edad".
Hablando de otro tipo de cosas: ¿a mí qué coño me importa la chapa de las putas señoras? Me tienen harto, últimamente. Es que siempre cuenta lo mismo: bla, bla, bla, bla, bla, bla... A los señores no hay quien los aguante, pero ellos lo tienen ya asumido y, por norma general, se quedan calladitos o bien entonan un discurso corto, a la par que incomprensible. No sabes muy bien si te están contando una anécdota suya, o si se están quejando de algo, o si te están contando un chiste. Lo bueno es que a ellos se la suda si les has entendido o no. Pero las señoras son muy cansinas. Sea como sea, ellas te tienen que contar su rollo de principio a fin, aunque ya se lo hayan contado antes a noventa y siete personas, con las mismas palabras.
Yo soy muy de costumbrismo, tradicionalmente. Me gusta mucho que las personas se expresen. Pero, por favor: con algo que contar. Si uno no tiene nada que contar, es mejor que se calle la puta boca. Seguramente es falta de entrenamiento. O de mal entrenamiento, con entrenadores patéticos, cuya misión fundamental es aguantar la paliza, con tal de poder dar la paliza después a cambio, sin ningún tipo de comunicación. Sólo como una vulgar expulsión de fluidos, como que X necesita cagar estando Y presente. Ya digo que el rollo me resulta parecido en hombres y en mujeres. Pero, por norma general, las mujeres necesitan más tiempo para "cagarlo", y yo soy muy impaciente. Será algo que se corrija con la edad, sospecho, o a lo mejor me pasa todo lo contrario, que igual se pone una señora a darme la chapa en la cola de la pescadería y yo directamente me piro. En la pescadería, ningún problema. Sí me gustan esas conversaciones, porque las señoras saben que está todo mediatizado y supeditado a la propia cola del pescado. Ahí no hay más cera que la que arde. Lo malo es cuando te paras a charlar, con el pescado ya metido en la bolsa. Ahí no hay cristo que lo pare. Si son las 10, te pueden dar las 12. Cualquier margen que dé para pochar unas verduras es suficiente. Más allá de las 14 horas, no hay señoras para dar la chapa. Eso es impepinable. Pero ándate con ojo si sales a las 10 de la mañana, que ya tienen la cocina recogida del desayuno y la casa ventilada. Eso es la mar salada y corrosiva, como mínimo hasta las 13 horas. Luego ya se recogen para rebozar el pescao, y por la tarde parece que ya están más tranquilas. No sé si por la siesta, o porque ya están hasta la polla de fregar el mismo plato cuatro veces en lo que va de día, que luego así los tienen, los platos, descoloridos, desdibujados, de tanta lejía y tanto frotar.
Yo soy muy de costumbrismo, repito. Pero a dosis. Es que últimamente me sueltan casi todas la misma chapa. Será por el ambiente señoril en el que me muevo últimamente. Todas vienen de un puto pueblo y alguien las ha colocado en Madrid de porteras, o a barrer o a limpiar. Es la generación "Gracita Morales", que ya están todas a tiro de piedra de la bombona de oxígeno. Si sale una empresaria, ya me froto yo las manos y me afilo la puntilla del bigote. Pero nada, o casi nada. Mi suegra fue modista, por ejemplo, y autónoma, pero se quedó "coitus interruptus", porque al final se quedó en eso. La Pepa tuvo una empresa familiar especializada en eliminar ratas, insectos, etc. Dos o tres relatos me parló, y yo los pelos como escarpias. Mi vieja, peluquera por cuenta ajena y después propia, todavía tiene cosas para escarbar, aunque hay que ser certero con las preguntas. Eso, dentro de la normalidad deseable. Dentro de la vulgaridad, como te descuides, a la vuelta de la esquina. Y la originalidad, cada vez menos. De cuando en cuando das con una puta, una actriz... Pero poca cosa. Joyas breves que relumbran entre las pelusas profusas. No digo ya por valía, sino por variedad. Un átomo no vale más que otro en el universo, pero una pieza de un puzle puede tener más peso que otra cuando se trata de llegar a una conclusión.
Seguramente, decía, cada vida tiene su originalidad. Pero está la cosa mal entrenada. Se ciñen las señoras a sus breves profesiones y circunstancias, sin darse cuenta de que llevar en una casa viviendo 34 años la única reacción que provoca es "criatura, 34 años lleva fregando el mismo plato, así está el pobre". El marido sonríe mucho, aunque de vez en cuando se le descuelga la mandíbula en un rictus que significa "puto coñazo, llego tarde a la partida o a mirar la obra".
Hay un señor que le veo mucho, y me resulta admirable. Hablo de vez en cuando con él, pero sólo sé cómo se llama. Creo que no he entendido ni una sola palabra de las que me haya dirigido. Sus respuestas e interpelaciones son como murmullos. Como cuando uno ha soñado algo y no recuerda muy bien lo que ha pasado. Yo, ni puta idea de quién es este señor, o para qué sirve. Sólo sé cómo se llama y que siempre lleva un carrito de la compra, que siempre está vacío. Lo transporta de un sitio a otro. Podría uno sospechar que alguna vez hay algo dentro. Pero yo no lo creo. A lo mejor algún día hay 1 kg. de tomates. Pero el resto de la vida, ¿qué? Coño, si tienes la vesícula destrozada y tu mujer está a dieta, ¿qué coño hay en ese carrito las veinticuatro horas del día? Nada. Un Actimel, cuarto de mandarinas (?). Poca cosa o nada. Porque luego el señor está en el bar, en la ferretería, en un semáforo... Rellenando la escena, como quien dice. Hablas con él y dice "bla, bla, bla". Tres "bla". Es una cosa muy focalizada. Ni puta idea de lo que dice. Lo mismo da si le dices que hace calor, o que hace frío, o que le queda bien la boina. Todo bien, porque seguramente él tampoco entiende por qué un tío con pelos le dice cosas que no sabe qué son, y él elabora una respuesta en su justa medida.
Ya otro día sigo con lo de los 12 voltios, porque esto apenas si vale como introducción al mundo de los voltios, watios y amperios, que deberían ser cosas de andar por casa que, sin embargo, son convenientemente opacas para el común de los mortales (incluido yo, grosso modo, hasta hace un par de semanas).
Salut.
Siendo ya reales las energías renovables, es absurdo y ridículo pagar una factura de 300-400 euros para estar calentito en invierno. Es más: tendría que estar prohibido por ley.
Yo, por ejemplo, odio actualmente las cocinas eléctricas. No me apaño. No calientan bien. No hay dios que las limpie. Yo, la de gas, la limpio cuando tiene mierda y tan bien. La "vitro"... Eso no hay quien lo limpie. Es decir, para dejarlo brillante y sin rayajos. Los hierros de una cocina de gas ya les puedes dar con la esponjilla de acero durante veinte años, que cada vez están más monos. Pero una vitro en seguida se parece a una ventanilla del metro.
En ese sentido, yo consideraría un capricho o una manía cocinar con gas natural (o butano, o propano).
Tengo la luz con Iberdrola y unos tubos de Gas Natural (que ahora van juntos) en la ventana. Les pregunté cuánto costaba dar de alta el gas. Me dijeron que la instalación corría de mi cuenta. Perfecto. ¿Y darme de alta? No sabían decirme (????), pero alrededor de 200€. Si ellos no hacen la instalación ni una revisión (gratuitamente), ¿en qué consiste darse de alta? => Deduzco que consiste, ni más ni menos, que en marcar la casilla de "también gas" en mi ficha de cliente. 200€ de vellón. Sea como sea, lo tienen perfectamente estudiado para que el consumo de gas y electricidad sea más o menos equivalente. Yo tengo dos casas abiertas, una con gas y otra con luz, y se gasta el mismo dinero en la factura para tener un bienestar equivalente.
Yo, a capricho, como digo, cocinaría siempre que pudiera con gas. Ahora estoy con butano y la bombona puede durarme varios meses (menos de 20 pavos la botella). Si es sólo para cocinar, el gasto es poco. Si es para agua caliente o calefacción, me consta que el gasto es mucho mayor. Pero lo lógico sería que casi todo fuese eléctrico, ya que las renovables funcionan así: de la energía mecánica se obtiene energía eléctrica (eólica, mareomotriz, etc.) y no un gas, que es un combustible fósil. Es tan cromañón quemar un leño como el gas "natural". Es una cosa que tendría que quedar obsoleta ya mismo.
El costo tendría que ser muy reducido para las grandes empresas con capacidad de inversión, y no muy elevado, como se nos dice. Me explico. Si yo tengo una casa donde poder montar una instalación de fotovoltaica, la monto y en dos o tres años (a lo sumo) está amortizada. Eso, si la monto yo. Si me la monta una "empresa especializada", ya se multiplicará por cinco. Y esa instalación dura ya para siempre, sustituyendo piezas ocasionalmente: un panel estropeado, una batería que se ha muerto, etc. Todo muchísimo más económico que pagar 2000 pavos al año (por ejemplo) hasta que uno se muera: 50 años = 100.000 pavos. Así son las matemáticas. 100.000 pavos en energía. Y con una buena instalación de renovables, en 50 años... Yo qué sé: ¿la décima parte? Y eso ahora, que los rendimientos son deficientes. Antes había paneles de 10, 20, luego de 40, luego de... 200W. Y me imagino que así seguirá subiendo, cada vez más prestaciones, y a un coste más reducido. Como los ordenadores, como cualquier otra cosa tecnológica... ¿Cuánto valía en la tienda la primera TV doméstica? Pues más o menos lo que hoy cuesta un coche. Hoy te encuentras en la basura una tele que funciona y que da 100 veces más de calidad que la primera televisión (mi cuñado tiró una hace poco, algo equivalente a la típica Trinitron de 15 pulgadas, que en 1929 hubiese parecido algo ultraterreno).
Las eléctricas tendrían que estar obligadas por ley a generar energía limpia total y absolutamente reciclable. Bajo ese presupuesto, los precios de mercado tendrían que reducirse a lo irrisorio (en comparación con lo que hoy es técnicamente posible). Pero eso es imposible de todo punto, porque hay que pagar unos sueldos irreales y sostener unos puestos de trabajo absolutamente innecesarios. Es por eso que se sigue sacando al mercado amianto (blanco, o del color que sea), porque es muy rentable coger una pedrusca del suelo y venderla como si fuera oro, aunque dé cáncer. Es, literalmente, la leyenda del Rey Midas. Sin hacer nada en concreto (es decir, tirando de leyes físico-químicas con dos o tres siglos de edad), te levantas un pastizal. Y si te actualizas, palmas pasta.
Por eso el futuro pasa por los 12 voltios. Observo (sin tener ni puta idea) que los 12 voltios sí que son más o menos estándar. Las redes domésticas pueden ir a muy distintos voltajes, según el sitio. Pero lo de los 12 voltios tiene un apaño más o menos universal, desde la batería del coche hasta la batería de meter las renovables (por lo menos a nivel doméstico).
En Internet tenemos el W3C, que se inventa unos estándares (que nadie cumple, en realidad, pero que son un punto de referencia, a base de cansinismo). Pero eso es "usabilidad". Algo como la electricidad, que es mucho más básico, tendría que estar ya estandarizado desde hace años y años y años y años y años. Seguro que me estoy pasando por el arco del triunfo un montón de ciencia pero, por lo general, a nivel filosófico no tiene ningún sentido EN ABSOLUTO que aquí en España tengamos 220V y en Pepitolandia 110 (por poner un ejemplo).
La estandarización ayuda, pero es lo de menos. Lo importante es lo de las renovables. Insisto: si uno tiene la posibilidad (espacio, condiciones) para montar un molino, fotovoltaica o lo que sea, se amortiza rápido. Es una inversión a medio plazo, como quien dice, en estos tiempos en que no sabe uno dónde estará hoy y dónde mañana.
Pero, a nivel empresarial, o estatal (donde se sabe perfectamente dónde uno estará mañana), eso ya tendría que llevar años y años en producción. No en producción: en USO. Suponiendo que el coste sea demasiado elevado para hacerlo así, de sopetón, se puede ir escalando. Es una cosa modular. En tiempos de Franco se cogía un valle, se desalojaba por completo y allí se hacía un puto embalse, para beber o para producir energía, y aquí paz y después gloria. Ahora no, porque las empresas son privadas y hacen lo que les sale de los cojones, haciendo uso de algo que fue expropiado en su día. Eso está muy bien. ¡Y no les pidas que lo devuelvan! ¡Ni que inviertan para mejorarlo todo! No, no, no... Eso hay que explotarlo hasta que reviente.
Leo en la historia de la tele que primero fue UK, luego un tipo en USA, luego otro ruso, luego... Como siempre, un invento común. A lo mejor surgió de uno algo, el comenzar, pero ya estaban todos en el ajo investigatorio y habría sido cuestión de tiempo. Al final hicieron falta varios señores, varias empresas y un montón de años (con un montonazo más de mentes pensantes) para llegar a lo que es hoy la puta tele. Entre medias, patentes y ostiejas, que es como decir "¡Eh! Yo he llegado el primero". Claro... Porque eras el único que iba al punto XYZ... Soso. Más que soso. ¡Inútil! Que han hecho falta 3.000 personas a lo largo del tiempo para que tu puto invento sirviera para algo. ¿Quién sabe? A lo mejor por culpa de este señor se han retrasado 50 años los LCDs.
Sea lo que sea, lo que sí está claro es que aquí lo único que vale son los intereses comerciales. A mí me parece muy bien reconocerle el invento a un señorín, y me parece muy mal que a costa de patentes y gilipolleces al final todo quede en que los socios capitalistas se ponen de acuerdo para explorar mesuradamente al usuario de la invención. ¡Con tecnología de hace más de medios siglo! Ostias, que las primeras fotovoltaicas "famosas" están en órbita desde el año '58 del siglo pasado. Vale que utilizasen galio o lo que fuera. Pero es que aquí llevamos cientos de años quemando carbón (!!!). El otro día decían que en Pekín había no sé si 900 microgramos de mierda por metro cúbico de aire, cuando lo máximo recomendado era de 27 microgramos. Estamos hablando de unos 20 millones de personas respirando veneno en su vida diaria. Y a China se la considera una economía emergente. ¿Eso qué es? Dinero. Comercio. Aprovechar, sin más ni más, la ignorancia, la comodidad. No es que sean muy emergentes los chinos. Es que en un contexto donde todo vale si pillas pasta, cualquier cosa es válida. Por eso el amianto viene de China, pero también de Canadá. Manda la pasta.
Mi apotegma en este caso es siempre el mismo: es posible otro mundo. Puede seguir habiendo gente que se forre de pasta con poco esfuerzo, pero sin joder a los demás. ¿A cuento de qué tiene uno que trabajar a día de hoy 8 horas diarias? Si yo quisiese/pudiese ser autarca, con dos o tres horas diarias de curro sería más que suficiente, en unas buenas condiciones de gestión energética (agua, luz, calor). A lo mejor no hay para todos, pero si para la mayoría. Para la "mayoría de edad".
Hablando de otro tipo de cosas: ¿a mí qué coño me importa la chapa de las putas señoras? Me tienen harto, últimamente. Es que siempre cuenta lo mismo: bla, bla, bla, bla, bla, bla... A los señores no hay quien los aguante, pero ellos lo tienen ya asumido y, por norma general, se quedan calladitos o bien entonan un discurso corto, a la par que incomprensible. No sabes muy bien si te están contando una anécdota suya, o si se están quejando de algo, o si te están contando un chiste. Lo bueno es que a ellos se la suda si les has entendido o no. Pero las señoras son muy cansinas. Sea como sea, ellas te tienen que contar su rollo de principio a fin, aunque ya se lo hayan contado antes a noventa y siete personas, con las mismas palabras.
Yo soy muy de costumbrismo, tradicionalmente. Me gusta mucho que las personas se expresen. Pero, por favor: con algo que contar. Si uno no tiene nada que contar, es mejor que se calle la puta boca. Seguramente es falta de entrenamiento. O de mal entrenamiento, con entrenadores patéticos, cuya misión fundamental es aguantar la paliza, con tal de poder dar la paliza después a cambio, sin ningún tipo de comunicación. Sólo como una vulgar expulsión de fluidos, como que X necesita cagar estando Y presente. Ya digo que el rollo me resulta parecido en hombres y en mujeres. Pero, por norma general, las mujeres necesitan más tiempo para "cagarlo", y yo soy muy impaciente. Será algo que se corrija con la edad, sospecho, o a lo mejor me pasa todo lo contrario, que igual se pone una señora a darme la chapa en la cola de la pescadería y yo directamente me piro. En la pescadería, ningún problema. Sí me gustan esas conversaciones, porque las señoras saben que está todo mediatizado y supeditado a la propia cola del pescado. Ahí no hay más cera que la que arde. Lo malo es cuando te paras a charlar, con el pescado ya metido en la bolsa. Ahí no hay cristo que lo pare. Si son las 10, te pueden dar las 12. Cualquier margen que dé para pochar unas verduras es suficiente. Más allá de las 14 horas, no hay señoras para dar la chapa. Eso es impepinable. Pero ándate con ojo si sales a las 10 de la mañana, que ya tienen la cocina recogida del desayuno y la casa ventilada. Eso es la mar salada y corrosiva, como mínimo hasta las 13 horas. Luego ya se recogen para rebozar el pescao, y por la tarde parece que ya están más tranquilas. No sé si por la siesta, o porque ya están hasta la polla de fregar el mismo plato cuatro veces en lo que va de día, que luego así los tienen, los platos, descoloridos, desdibujados, de tanta lejía y tanto frotar.
Yo soy muy de costumbrismo, repito. Pero a dosis. Es que últimamente me sueltan casi todas la misma chapa. Será por el ambiente señoril en el que me muevo últimamente. Todas vienen de un puto pueblo y alguien las ha colocado en Madrid de porteras, o a barrer o a limpiar. Es la generación "Gracita Morales", que ya están todas a tiro de piedra de la bombona de oxígeno. Si sale una empresaria, ya me froto yo las manos y me afilo la puntilla del bigote. Pero nada, o casi nada. Mi suegra fue modista, por ejemplo, y autónoma, pero se quedó "coitus interruptus", porque al final se quedó en eso. La Pepa tuvo una empresa familiar especializada en eliminar ratas, insectos, etc. Dos o tres relatos me parló, y yo los pelos como escarpias. Mi vieja, peluquera por cuenta ajena y después propia, todavía tiene cosas para escarbar, aunque hay que ser certero con las preguntas. Eso, dentro de la normalidad deseable. Dentro de la vulgaridad, como te descuides, a la vuelta de la esquina. Y la originalidad, cada vez menos. De cuando en cuando das con una puta, una actriz... Pero poca cosa. Joyas breves que relumbran entre las pelusas profusas. No digo ya por valía, sino por variedad. Un átomo no vale más que otro en el universo, pero una pieza de un puzle puede tener más peso que otra cuando se trata de llegar a una conclusión.
Seguramente, decía, cada vida tiene su originalidad. Pero está la cosa mal entrenada. Se ciñen las señoras a sus breves profesiones y circunstancias, sin darse cuenta de que llevar en una casa viviendo 34 años la única reacción que provoca es "criatura, 34 años lleva fregando el mismo plato, así está el pobre". El marido sonríe mucho, aunque de vez en cuando se le descuelga la mandíbula en un rictus que significa "puto coñazo, llego tarde a la partida o a mirar la obra".
Hay un señor que le veo mucho, y me resulta admirable. Hablo de vez en cuando con él, pero sólo sé cómo se llama. Creo que no he entendido ni una sola palabra de las que me haya dirigido. Sus respuestas e interpelaciones son como murmullos. Como cuando uno ha soñado algo y no recuerda muy bien lo que ha pasado. Yo, ni puta idea de quién es este señor, o para qué sirve. Sólo sé cómo se llama y que siempre lleva un carrito de la compra, que siempre está vacío. Lo transporta de un sitio a otro. Podría uno sospechar que alguna vez hay algo dentro. Pero yo no lo creo. A lo mejor algún día hay 1 kg. de tomates. Pero el resto de la vida, ¿qué? Coño, si tienes la vesícula destrozada y tu mujer está a dieta, ¿qué coño hay en ese carrito las veinticuatro horas del día? Nada. Un Actimel, cuarto de mandarinas (?). Poca cosa o nada. Porque luego el señor está en el bar, en la ferretería, en un semáforo... Rellenando la escena, como quien dice. Hablas con él y dice "bla, bla, bla". Tres "bla". Es una cosa muy focalizada. Ni puta idea de lo que dice. Lo mismo da si le dices que hace calor, o que hace frío, o que le queda bien la boina. Todo bien, porque seguramente él tampoco entiende por qué un tío con pelos le dice cosas que no sabe qué son, y él elabora una respuesta en su justa medida.
Ya otro día sigo con lo de los 12 voltios, porque esto apenas si vale como introducción al mundo de los voltios, watios y amperios, que deberían ser cosas de andar por casa que, sin embargo, son convenientemente opacas para el común de los mortales (incluido yo, grosso modo, hasta hace un par de semanas).
Salut.
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