Curiosidad

Hace poco me picó algo en el pie (?), seguramente un arácnido maloso, y empezó a subirme por el pie una especie de alergia. El dedo se me puso como un botijo y empezó, literalmente, a necrosárseme el pie. Fui al médico y me dieron cortisona, aunque no estoy seguro de deberle la curación a la cortisona, porque tampoco le hice mucho caso al tratamiento. Yo creo que se hubiera ido solo.
Da igual. El caso es que la cosa empezó a bajar. La piel del empeine se regeneró muy rápido, es más leve. Pero la del dedo del pie acabó por amoratarse entera y al final se me hizo una especie de costra, como si hubiese sufrido una quemadura o una herida tocha. Hoy se ha desprendido esa "costra" y por debajo ha aparecido la piel nueva, y aún los rastros del picotazo en forma de pequeño círculo rojizo.
Me ha quedado un amago de dolor en las falanges del pie, pero no sé si será a causa del suceso o más bien por las caminatas que me pego últimamente.

Fin de la curiosidad.