La religión moderna

John Lennon nunca me cayó demasiado bien y por eso le tomé a mal su declaración que decía "somos más famosos que Jesucristo" (o algo similar). Luego, porque soy así de majo, le perdoné. Me sigue pareciendo mal que lo dijera él, pero dentro de su contexto hay que reconocer que no era una afirmación del todo incorrecta.
Hoy va España y gana el Mundial de fútbol. ¿Cuál es la "intervención pública" más famosa del Papa más famoso del mundo? ¿Cuántos millones de personas bebían sus palabras como si fueran el maná de Egipto? Una mierda, en comparación con el partido de hoy.
La religión, como la política, suele apelar al lado malo de las emociones: el miedo, una mezcla de seudo-ciencia y seudo-razón mezclada con seudo-emociones, la culpa... También intentan "abanderar" el "amor", pero muy mal porque, seamos francos, uno puede sentir más el amor con la mirada bizca y amable de la vecina de abajo, un día, bajando la basura, que con todas las increpaciones que pueda volcar un cura a quemarropa entre su grey.
Por todo eso hoy me resulta más fácil expresar un pensamiento tópico, supongo: la religión del hombre moderno es el fútbol, la play station y el gran hermano. Cualquier cosa que una un hombre a otro hombre. Es la religión de la "red". Sigue siendo importante el nexo que une a un hombre consigo mismo (llámese Dios o la búsqueda de la verdad o la búsqueda de uno mismo o la búsqueda del sentido de la vida). Pero la religión del hombre moderno, así como lo veo hoy, ahora mismo, consiste más en la aceptación de la vida tal cual es (para unos una mierda, para otros "súper" y para otros mejor no pensarlo) y en la búsqueda de la comunión espiritual con los homo sapiens sapiens de al lado.
Sin duda este pensamiento puede afinarse mucho más. Pero otro día.