La Constitución
Para quien le interese, la de 1978:
https://www.boe.es/eli/es/c/1978/12/27/(1)/con
Y la de 1812:
http://www.congreso.es/constitucion/ficheros/historicas/cons_1812.pdf
La de 1812 (sólo me he leído el principio de ambas) es muy bonita. Dice nosequé de Dios y de las leyes "sabias" que hay que obedecer. También deja muy claro lo que había que dejar claro en aquellos tiempos: que el poder emana del pueblo y sanseacabó.
La de 1978 ya empieza diciendo la verdad a medias. Añade, sobre la de 1812 (y copiando la construcción antigua, cosa que me parece de mal gusto), que la constitución ha sido aprobada por las Cortes y, además, ratificada por el pueblo español (en referéndum). Yo soy español porque sí, pero yo no he ratificado nada de eso. Estoy bajo el paraguas de una constitución que ni yo ni la mayoría de mis contemporáneos conocemos. Los españoles de aquella época podían hacer dos cosas: votar por la constitución, o bien resucitar a Franco, cosa que no era de recibo. Así que fue ratificada, sí, por el pueblo, pero no elaborada ni, probablemente, conocida por él. Hasta ahí, bien.
Luego, en la primera página, ya se me ha caído el alma a los pies.
Se supone que lo más importante va al principio. Así que lo más importante que define al pueblo español es si la bandera es de un color u otro, que es indivisible (o sea, que nada de desgajarse, cosa obvia si se supone que estás constitucionando para un grupo de personas, que la constitución se aplique a ese grupo de personas), que hay que respetar las lenguas de esos gajos indivisibles, que las banderas de esos otros gajos indivisibles también se valen, y que son muy importantes los partidos políticos y los sindicatos. Eso, en la primera página.
El artículo 1, al menos, vuelve a repetir que el poder emana del pueblo. Pero dice tres veces, para que quede claro, que el "Estado" ("de Derecho", para más INRI) es la expresión del pueblo. Es decir, los políticos, las banderas y las monarquías parlamentarias son los que parten el bacalao.
La cosa tendría que haberse redactado más claramente: "Un grupo de ex-políticos de Franco y otros más guapos y jóvenes que son los que van a partir la pana a partir de ahora, se reúnen porque ha muerto Franco y deciden que se van a poner las botas y que el indolente pueblo español, a partir de ahora, va a rendir culto a las banderas, a besar el culo de las autonomías, que a su vez besarán el culo de la bandera principal, y todo avalado por el pueblo ése. Ahora firmen aquí o resucitamos a Franco:". Vale que eran tiempos de "cambios" y que tampoco era para echarse al monte. Total, para una cosa tan trascendente, la aprobación de la constitución tampoco fue para tanto. Un 59% me parece muy poco, la verdad, y un síntoma muy claro de cómo fueron las cosas: como siempre han sido en este país. Anti-cambios.
Si yo me viese obligado a redactar una Constitución (con mayúsculas) de 50 páginas, la organización del "Estado" empezaría por lo menos en la página 30. No se explica por qué el poder emana del pueblo. Por tanto, tenemos que darlo por válido igual que si dijesen que emana del rey o del obispo. No se explica por qué es necesaria una constitución ni para qué sirve. El qué-cómo-quién-dónde-cuándo, más o menos, queda dicho en el preámbulo. Como anécdota perfectamente inútil. Pero ni el porqué ni el para qué.
Tanto rollo de banderas, lenguas, autonomías e indisolubilidad da sensación más bien de todo lo contrario: de desunión, de necesidad de buscar un acuerdo común rápido (la Constitución) y luego ya se verá cómo se reparte el pescado. Muy mal, porque treinta años después los políticos siguen sin ponerse de acuerdo con esa dichosa primera página de la Constitución.
Los políticos deberían ser, creo que ya lo he dicho antes en algún sitio y, por lo tanto, me estoy repitiendo... Deberían ser órganos marginales y secundarios para el gobierno de la nación. Tendría que haber algo equivalente a referendumses para aprobar decretos, leyes orgánicas, etc. Y, en caso de abstenerse uno, tomaría su voto su representante político (en el caso de que el sujeto lo hubiese dispuesto así yendo a las putas urnas). De otro modo, sucede lo que está sucediendo y lo que siempre ha sucedido: que los políticos son instrumento máximo de poder en manos de los ricos y poderosos y, en última instancia, de sí mismos. Instrumento del pueblo, en rarísimos casos.
Hay que modificar esa constitución, porque lo primero que se hace es darle el poder al pueblo y, seguidamente, quitárselo, diciendo que en realidad son los "representantes del pueblo" los que mandan. Por encima del individuo, su representante, su bandera, su idioma, su sindicato. Si de verdad mandase el individuo, el pueblo, el artículo 2 establecería un mecanismo popular para quitar de enmedio a todo lo que se anteponga por encima del pueblo. Elecciones generales para cambiar de representante cada cuatro años no es lo que se dice... Algo demasiado funcional.
De todos modos ya seguiré leyendo, a ver si encuentro algo original.
https://www.boe.es/eli/es/c/1978/12/27/(1)/con
Y la de 1812:
http://www.congreso.es/constitucion/ficheros/historicas/cons_1812.pdf
La de 1812 (sólo me he leído el principio de ambas) es muy bonita. Dice nosequé de Dios y de las leyes "sabias" que hay que obedecer. También deja muy claro lo que había que dejar claro en aquellos tiempos: que el poder emana del pueblo y sanseacabó.
La de 1978 ya empieza diciendo la verdad a medias. Añade, sobre la de 1812 (y copiando la construcción antigua, cosa que me parece de mal gusto), que la constitución ha sido aprobada por las Cortes y, además, ratificada por el pueblo español (en referéndum). Yo soy español porque sí, pero yo no he ratificado nada de eso. Estoy bajo el paraguas de una constitución que ni yo ni la mayoría de mis contemporáneos conocemos. Los españoles de aquella época podían hacer dos cosas: votar por la constitución, o bien resucitar a Franco, cosa que no era de recibo. Así que fue ratificada, sí, por el pueblo, pero no elaborada ni, probablemente, conocida por él. Hasta ahí, bien.
Luego, en la primera página, ya se me ha caído el alma a los pies.
Se supone que lo más importante va al principio. Así que lo más importante que define al pueblo español es si la bandera es de un color u otro, que es indivisible (o sea, que nada de desgajarse, cosa obvia si se supone que estás constitucionando para un grupo de personas, que la constitución se aplique a ese grupo de personas), que hay que respetar las lenguas de esos gajos indivisibles, que las banderas de esos otros gajos indivisibles también se valen, y que son muy importantes los partidos políticos y los sindicatos. Eso, en la primera página.
El artículo 1, al menos, vuelve a repetir que el poder emana del pueblo. Pero dice tres veces, para que quede claro, que el "Estado" ("de Derecho", para más INRI) es la expresión del pueblo. Es decir, los políticos, las banderas y las monarquías parlamentarias son los que parten el bacalao.
La cosa tendría que haberse redactado más claramente: "Un grupo de ex-políticos de Franco y otros más guapos y jóvenes que son los que van a partir la pana a partir de ahora, se reúnen porque ha muerto Franco y deciden que se van a poner las botas y que el indolente pueblo español, a partir de ahora, va a rendir culto a las banderas, a besar el culo de las autonomías, que a su vez besarán el culo de la bandera principal, y todo avalado por el pueblo ése. Ahora firmen aquí o resucitamos a Franco:". Vale que eran tiempos de "cambios" y que tampoco era para echarse al monte. Total, para una cosa tan trascendente, la aprobación de la constitución tampoco fue para tanto. Un 59% me parece muy poco, la verdad, y un síntoma muy claro de cómo fueron las cosas: como siempre han sido en este país. Anti-cambios.
Si yo me viese obligado a redactar una Constitución (con mayúsculas) de 50 páginas, la organización del "Estado" empezaría por lo menos en la página 30. No se explica por qué el poder emana del pueblo. Por tanto, tenemos que darlo por válido igual que si dijesen que emana del rey o del obispo. No se explica por qué es necesaria una constitución ni para qué sirve. El qué-cómo-quién-dónde-cuándo, más o menos, queda dicho en el preámbulo. Como anécdota perfectamente inútil. Pero ni el porqué ni el para qué.
Tanto rollo de banderas, lenguas, autonomías e indisolubilidad da sensación más bien de todo lo contrario: de desunión, de necesidad de buscar un acuerdo común rápido (la Constitución) y luego ya se verá cómo se reparte el pescado. Muy mal, porque treinta años después los políticos siguen sin ponerse de acuerdo con esa dichosa primera página de la Constitución.
Los políticos deberían ser, creo que ya lo he dicho antes en algún sitio y, por lo tanto, me estoy repitiendo... Deberían ser órganos marginales y secundarios para el gobierno de la nación. Tendría que haber algo equivalente a referendumses para aprobar decretos, leyes orgánicas, etc. Y, en caso de abstenerse uno, tomaría su voto su representante político (en el caso de que el sujeto lo hubiese dispuesto así yendo a las putas urnas). De otro modo, sucede lo que está sucediendo y lo que siempre ha sucedido: que los políticos son instrumento máximo de poder en manos de los ricos y poderosos y, en última instancia, de sí mismos. Instrumento del pueblo, en rarísimos casos.
Hay que modificar esa constitución, porque lo primero que se hace es darle el poder al pueblo y, seguidamente, quitárselo, diciendo que en realidad son los "representantes del pueblo" los que mandan. Por encima del individuo, su representante, su bandera, su idioma, su sindicato. Si de verdad mandase el individuo, el pueblo, el artículo 2 establecería un mecanismo popular para quitar de enmedio a todo lo que se anteponga por encima del pueblo. Elecciones generales para cambiar de representante cada cuatro años no es lo que se dice... Algo demasiado funcional.
De todos modos ya seguiré leyendo, a ver si encuentro algo original.
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