Libros usados

Ahora me ha dado, de vez en cuando, por comprar libros usados. Algunos los leo y otros no.
La librería del Dos de Mayo (junto al Café de Mahón) es la mejor de todas. Ponen a la puerta una mesa plegable con 3 libros a 5 pavos, y hay muchos que son buenos. Hay de todo un poco. No sólo la tropocentésima copia del Rimas y Leyendas de Bécquer o de un libro cualquiera de Nietzsche.
Hay otra en Palma (junto a los Relloso). Tienen una especie de maleta vintage a la puerta con libros a 1 pavo, pero el 99,9% son basura o libros tan extremadamente clásicos que todo el mundo los tiene, aunque sea ciego y no estén en braille.
Ahora se ha puesto de moda sacar los libros a la puerta. En San Bernardo, cerca de Quevedo, hay otra librería que ahora pone unas mesas a la puerta. Un día les puse el ojo encima pero no encontré nada digno de atención, salvo unas ediciones bien simpáticas de los Diálogos de Platón y El asno de oro de Apuleyo.
Para libros de nuevo, han puesto hace relativamente poco una librería muy guapa en San Vicente Ferrer (se llama "Tres rosas amarillas"). Es pequeña, así que se han concentrado en hacer una "selección guapa", sobre todo de novela. Tienen el escaparate principal, con cosas algo más comerciales (ningún best-seller, of course), y un ventanal que da a la "calle del Dos de Mayo" que siempre está llena de cosas realmente apetecibles.
Por cierto, que ahora se han puesto de moda los libros pop-up. Sin querer (es decir, involuntariamente) pagué hace poco 30 pavos por un libro pop-up del Mago de Oz. La cosa cada vez es más compleja. Para empezar, en la primera página sale un popup hacia arriba tremendo con el tornado texano que se llevó la casa de Dorothy. Y ahí mismo hay solapas con otras cosas. Y luego otra serie de montajes espectaculares, incluyendo unas gafas de cartón para ver aún más verde la Ciudad Esmeralda. 30 pavos bien pagados, pero es un libro para dejarlo quieto-parao en la estantería, no vaya a ser que se destropicie.